
Hasta el momento son cuatro itinerarios y una pequeña guía de servicios. El primero es una ruta por el entorno rural de Larrauri y sus palacetes de verano, propios de su época de esplendor. Otro de seis kilómetros de recorrido llano por tierra y asfalto atraviesa Emerando y su batería de molinos de agua; y un tercero, de 40 minutos, se adentra por las pistas en cuesta de Markaida. La propuesta se completa con un paseo por el casco urbano que se detiene en las plazas, fuentes, iglesias, cementerio y esculturas de la localidad.
Se trata de toda una invitación a recorrer esta villa de Bizkaia y detenerse en sus rincones más pintorescos.