La denominada “Mina Ángela”, situada en el barrio de Matienzo, se halla constituida por una serie de labores mineras a cielo abierto y otras de interior caracterizadas por la presencia de numerosos filones verticalizados que fueron explotados principalmente entre los años 1940 y 1976.
El objeto de esta actividad se centró en la extracción de galena, esfalerita y fluorita.
Situada a unos 225 m. de altitud sobre el nivel del mar, se encuentra cerca del barrio de Matienzo, ubicado en la zona noroccidental del término municipal de Karrantza.
Con prendas de abrigo, botas, casco y luz, nos adentraremos en la cueva en la visita espelo-minera.
A lo largo el recorrido por la Mina Ángela se pueden observar las huellas laboreo-mineras llevadas a cabo en su interior y contemplar las numerosas formaciones geológicas que la naturaleza fue creando pacientemente durante miles de años en las cuevas o soplados de “Angela” y “La Leona”, puestas al descubierto por las “pegas“ o voladuras que se efectuaban en los avances de galería para buscar y explotar los filones de mineral.
Cuevas o soplados que en el momento de su descubrimiento asombraban por la belleza de su concrecionamiento, destacando en ellas algunas extraordinarias estalactitas recubiertas por excéntricas de una blancura inmaculada.
En la actualidad, estas cuevas mantiene en parte la belleza y espectacularidad primigenias.
A partir de los años 40 y hasta finales de 1964 la Compañía de Minas “Sierra de Gredos, S.A.”, empresa que poseía la concesión minera formada por el grupo de minas de Carranza, titulada minas “Ángela y otras”, llevó a cabo labores de explotación de mineral de plomo en la mina titulada “Ángela”, situándose la bocamina principal de extracción del mineral en el paraje conocido como “Las Veneras”, a una altitud de 240 m. y a medio kilómetro de distancia del barrio de Matienzo.
A partir de 1965, después de una previa campaña de investigación geológica, CEMINSA (Compañía de Explotaciones Minero Industriales y Marítimas, S.A.), Sociedad Minera con sede social en Oviedo (Asturias), toma en arrendamiento los derechos de explotación de este grupo de minas.
CEMINSA llevó a cabo labores de investigación, mediante sondeos en el criadero, enclavado en terreno geológico del Cretáceo inferior, para posteriormente llevar a cabo los planes de labores encaminados a la explotación de Plomo, Espato Fluor y Zinc.
A finales de 1977, al no existir reservas de mineral a la vista, CEMINSA pone fin a los trabajos de explotación en la mina Ángela, prescindiendo del personal de la plantilla mediante el correspondiente expediente de crisis por agotamiento de cubicaciones seguras de mineral.
Los principales accesos a Mina Ángela los constituye, tanto desde Bilbao como desde Cantabria, la carretera BI-630 hasta llegar al barrio de Ambasaguas y desde aquí la carretera Bi-4623, que lleva hasta el barrio de Matienzo (2 km).
El objeto de esta actividad se centró en la extracción de galena, esfalerita y fluorita.
Situada a unos 225 m. de altitud sobre el nivel del mar, se encuentra cerca del barrio de Matienzo, ubicado en la zona noroccidental del término municipal de Karrantza.
Con prendas de abrigo, botas, casco y luz, nos adentraremos en la cueva en la visita espelo-minera.
A lo largo el recorrido por la Mina Ángela se pueden observar las huellas laboreo-mineras llevadas a cabo en su interior y contemplar las numerosas formaciones geológicas que la naturaleza fue creando pacientemente durante miles de años en las cuevas o soplados de “Angela” y “La Leona”, puestas al descubierto por las “pegas“ o voladuras que se efectuaban en los avances de galería para buscar y explotar los filones de mineral.
Cuevas o soplados que en el momento de su descubrimiento asombraban por la belleza de su concrecionamiento, destacando en ellas algunas extraordinarias estalactitas recubiertas por excéntricas de una blancura inmaculada.
En la actualidad, estas cuevas mantiene en parte la belleza y espectacularidad primigenias.
A partir de los años 40 y hasta finales de 1964 la Compañía de Minas “Sierra de Gredos, S.A.”, empresa que poseía la concesión minera formada por el grupo de minas de Carranza, titulada minas “Ángela y otras”, llevó a cabo labores de explotación de mineral de plomo en la mina titulada “Ángela”, situándose la bocamina principal de extracción del mineral en el paraje conocido como “Las Veneras”, a una altitud de 240 m. y a medio kilómetro de distancia del barrio de Matienzo.
A partir de 1965, después de una previa campaña de investigación geológica, CEMINSA (Compañía de Explotaciones Minero Industriales y Marítimas, S.A.), Sociedad Minera con sede social en Oviedo (Asturias), toma en arrendamiento los derechos de explotación de este grupo de minas.
CEMINSA llevó a cabo labores de investigación, mediante sondeos en el criadero, enclavado en terreno geológico del Cretáceo inferior, para posteriormente llevar a cabo los planes de labores encaminados a la explotación de Plomo, Espato Fluor y Zinc.
A finales de 1977, al no existir reservas de mineral a la vista, CEMINSA pone fin a los trabajos de explotación en la mina Ángela, prescindiendo del personal de la plantilla mediante el correspondiente expediente de crisis por agotamiento de cubicaciones seguras de mineral.
Los principales accesos a Mina Ángela los constituye, tanto desde Bilbao como desde Cantabria, la carretera BI-630 hasta llegar al barrio de Ambasaguas y desde aquí la carretera Bi-4623, que lleva hasta el barrio de Matienzo (2 km).
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