La Torre Mayor de Santacara es el emblema de este pueblo navarro. Formada por almenas en pirámide y ladroneras en sus costados, fue construida en el siglo XIII para dotar al castillo medieval de un punto estratégico de observación y defensa. Esta altiva construcción de casi 30 metros de altura ofrecía una visión privilegiada de gran parte del valle del Aragón.
El paso del tiempo había dejado la torre en estado ruinoso, pero su reciente restauración ha permitido recuperar la belleza y esplendor de este monumento, único de Nafarroa que mantiene su torreón original.
Sus viejas piedras han visto pasar 700 años de historia, y las nuevas, con las que se han reconstruido parcialmente los muros aseguran su perduración. La reforma se está completando con el estudio de una galería subterránea, que conduce a la base de la torre, y también se va a acondicionar el acceso para que sirva de atractivo turístico.
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